Por qué recuperamos el peso perdido durante las dietas? el efecto rebote se produce principalmente por haber planteado el adelgazamiento de forma errónea: dietas demasiado estrictas, no hacer ejercicio, etc. provoca que parte de lo perdido durante la fase de adelgazamiento sea masa muscular y que nuestro metabolismo se desacelere... y un metabolismo ralentizado no es capaz de gastar las calorías que ingerimos después de la dieta y no tiene más remedio que almacenarlas como grasa.
Pero el problema del efecto rebote es mucho más produndo e incluso tiene un componente genético: es lo que se llama "Set Point Theory" que traducido sería "Teoría del Punto Fijo de Control de Peso"... una teoría científica que afirma que cada persona tiene una tendencia natural a mantener un peso determinado durante un período de su vida y su organismo hará todo lo posible para alcanzar y mantener ese peso.
Es decir, nuestro metabolismo se autoregula y, al igual que intenta mantener la temperatura del cuerpo alrededor de los 37 ºC, tiene un mecanismo biológico determinado genéticamente que actúa para mantener un peso estable controlando la entrada de energía (apetito) y el gasto de la misma (metabolismo).
Aunque... ese punto fijo de peso no depende en un 100% de nuestra genética y puede ser variado a nuestro favor con una dieta adecuada y un programa de ejercicios. El truco consiste en saber como y cuando aplicar esa dieta y ese programa de ejercicios para variar tu punto fijo de control de peso.
Por ejemplo, imaginemos que una persona de los 20 a los 30 años mantiene un peso más o menos constante de 60 kilos. Este punto fijo de 60 kilos se mantendrá constante gracias a dos factores: su genética y su estilo de vida (dieta + ejercicio). Si a partir de los 30 años comienza a variar su estilo de vida de forma errática y deja de cuidar su dieta y de hacer ejercicio, su cuerpo empezará a considerar como su punto fijo de control de peso, digamos, unos 70 kilos.
Esos 10 kilos extra serán muy difíciles de perder sin una estrategia adecuada que vuelva a reestablecer ese punto fijo del cuerpo en los 60 kilos iniciales. Con dietas rápidas y mal diseñadas esa persona sólo conseguirá unos resultados temporales porque genéticamente su cuerpo siempre luchará por alcanzar el peso que piensa que él tiene marcado como el adecuado (70 kilos).
Cómo Vencer al Efecto Yo-Yo Variando el Punto Fijo de Control de Peso
Para vencer al efecto yo-yo y no recuperar el peso perdido hace falta algo más que una dieta efectiva... ¡Debemos saber recalibrar nuestro punto fijo de control de peso a nuestro favor! por mucha dieta y ejercicio que hagamos nuestro cuerpo siempre tendrá la tendencia a volver al peso que él considera como adecuado... ¿Cómo podemos evitar esto para mantener nuesro peso ideal con mayor comodidad?
Variar nuestro punto fijo de control de peso es posible con un método para adelgazar adecuado.
El organismo tiene varios mecanismos de control que detectan cuando empiezas a bajar de peso y automáticamente autorregulan tu sensación de hambre y tu gasto de energía para evitar ese cambio de peso. Por eso, cuando nos ponemos a dieta cada vez tenemos más hambre y, a medida que pasa el tiempo, cada vez perdemos menos peso. Luego, cuando dejamos la dieta, esos mecanismos de control hacen todo lo posible para acumular el máximo de grasas posible y recuperar su peso inicial.
Aún así ese punto fijo de control de peso se puede variar mediante lo que se llaman fases de adaptación... en vez de intentar perder todo el peso que te sobre de una sóla vez lo hariamos por fases, es decir, se pierde una cierta cantidad de peso y luego se pasa a una fase de adaptación en la que lo único que intentaríamos sería mantenerte en ese peso durante un tiempo.
Luego volverías a perder una cierta cantidad de peso y de nuevo a la fase de adaptación y así sucesivamente para que tu cuerpo se adapte a ese nuevo punto fijo de control de peso.Mientras más sobrepeso tengamos, más largas deberán ser estas fases de adaptación.
De esta forma, aunque la pérdida de peso sea más lenta, será definitiva y eso es lo que realmente importa. En vez de estar luchando contra nuestro metabolismo, estaremos jugando a su favor e iremos adaptandolo a nuevos puntos fijos de control de peso cada vez más bajos.